Gabriel Soto dijo que evitó usar doble en una escena de riesgo desde una altura de 500 pies en las Barrancas del Cobre, Chihuahua, para la telenovela Un refugio para el amor, debido a que es un profesional apasionado de su trabajo.

“Hubo un doble disponible, pero no se requirió su labor en las escenas de Chihuahua, para una caída muy peligrosa de 100 pies que hizo Brandon Peniche. Finalmente, nosotros hicimos todo lo que se verá en pantalla, nos colgamos de ahí y fue un gran logro porque nos entrenamos dos meses para hacer esa escena”, explicó Soto a Notimex.

“Mi personaje, Rodrigo, es amante de los deportes extremos, en específico, le gusta escalar en roca, por eso nos fuimos allá donde nos colgamos a 500 pies de altura”, platicó el actor, quien aún tiene lastimadas las manos por la escena.

Aunque la vida de ambos actores corrió peligro, Soto indicó: “Aquí estamos sanos y a salvo, aunque [estoy] un poco enfermo de la garganta”.

Se refiere a las bajas temperaturas que se registran en la llamada “Colina del Perro”, en Bosques de las Lomas, donde graban episodios cruciales en el escenario que funge de mansión de la familia Torreslanda, a la que pertenece Rodrigo