Silvia Manríquez se despide de Paula
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La celebración del día de las madres fue un momento de reconciliación para la familia Guzmán en Amores verdaderos
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Pero nadie se iba a imaginar el desenlace de este festivo reencuentro, pues Beatriz (Susana González) y Francisco (Sebastián Rulli) experimentaron un inmenso dolor.
"El final de este personaje, de Paula, de nuestra madre creo que fue hermoso porque lo que ella quería era reunir a su familia y al final lo logró. Creo que se fue con una bonita sensación", dijo Susana.
"Cuesta trabajo cortarlo inmediatamente, porque además despedirme hoy de todos mis compañeros, del staff, del productor, de mis amigos", aseguró Silvia Manríquez.
La emotividad de estas escenas requirió atención a las indicaciones del director Salvador Garcini, además de concentración profunda para adentrarse en la situación de los personajes.
"Les han pasado tantas cosas a estos personajes que el momento de por sí se vuelve emotivo, si conoces el antecedente. Entonces de verdad no tengo que recurrir a cosas de mi vida ni nada, el simple momento me conmueve", comentó Susana González.
Con estas escenas, la actriz concluye su participación en la historia producida por Nicandro Díaz.
"Bueno, una gran actriz como Silvia merece el reconocimiento no solamente de la producción sino de todos sus compañeros que ha hecho un trabajo extraordinario en un papel complejo. A parte de la emoción del personaje está la emoción de Silvia Manríquez de terminar una telenovela a la que de verdad le dio su amor verdadero", concluyó el productor.
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Pero nadie se iba a imaginar el desenlace de este festivo reencuentro, pues Beatriz (Susana González) y Francisco (Sebastián Rulli) experimentaron un inmenso dolor.
"El final de este personaje, de Paula, de nuestra madre creo que fue hermoso porque lo que ella quería era reunir a su familia y al final lo logró. Creo que se fue con una bonita sensación", dijo Susana.
"Cuesta trabajo cortarlo inmediatamente, porque además despedirme hoy de todos mis compañeros, del staff, del productor, de mis amigos", aseguró Silvia Manríquez.
La emotividad de estas escenas requirió atención a las indicaciones del director Salvador Garcini, además de concentración profunda para adentrarse en la situación de los personajes.
"Les han pasado tantas cosas a estos personajes que el momento de por sí se vuelve emotivo, si conoces el antecedente. Entonces de verdad no tengo que recurrir a cosas de mi vida ni nada, el simple momento me conmueve", comentó Susana González.
Con estas escenas, la actriz concluye su participación en la historia producida por Nicandro Díaz.
"Bueno, una gran actriz como Silvia merece el reconocimiento no solamente de la producción sino de todos sus compañeros que ha hecho un trabajo extraordinario en un papel complejo. A parte de la emoción del personaje está la emoción de Silvia Manríquez de terminar una telenovela a la que de verdad le dio su amor verdadero", concluyó el productor.
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