William Levy dijo estar feliz por la experiencia que vivió hace unos días al grabar algunas escenas de La Tempestad en una cárcel de Veracruz, en dónde su personaje pagará una culpa que no cometió.

Levy, confesó que al estar ahí recordó los días difíciles que pasó en la tierra que lo vio nacer y aseguró que antes de ser famoso su vida fue precaria y muy difícil de sobrellevar.

El actor vivió un bello momento al convivir con las familias de los presos, y sobre todo disfrutó el poder acercarse a los hijos de los reclusos, hecho que sensibilizó a William.

El intérprete de Damián en La Tempestad, mantuvo una platica con los internos de dicho reclusorio y les pidió que nunca perdieran la fe y que día a día le dieran las gracias a la vida por tener un techo y comida para vivir, ya que muchas personas en su país no tienen ni en dónde vivir.

Para finalizar, William Levy dijo estar sorprendido y agradecido por el buen recibimiento y el excelente trato que los internos le dieron.