Carlos de la Mota se creía vaquero
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Carlos de la Mota, a quien actualmente vemos e la telenovela Corazón indomable, es de origen dominicano, sin embargo ya se considera mexicano.
El galán nos contó cómo se celebra el Día de abril en su natal República Dominicana.
"No tanto como aquí, la verdad que desde que llegué aquí me percaté de la importancia que tiene el Día del niño; yo creo que es un día muy importante que debemos de celebrar todos los días, estoy totalmente convencido de que la mayoría que podamos conservar el niño que tenemos dentro seremos mucho mejores personas, menos intolerantes, mucho más felices, más flexibles, entonces ese niño que hay dentro, hay que celebrarlo no sólo un día sino todos los días".
Confesó que de pequeño era travieso: "Mi papá una vez me regaló un caballo y salí a dar la vuelta, entonces no tenia silla y fui montando y me fui de lado, y si estaba presumiendo mi caballo, pero me caí el primer día".
Carlos imaginaba que era vaquero: "Mi papá siempre usa botas, sombrero y pistola, vivimos siempre de la cosecha del arroz, entonces yo tenía botas y sombrero, y me creía vaquero, y jugaba evidentemente a actuar, veía las novelas y las películas de Pedro Infante, de Jorge Negrete".
Por supuesto que le gustaban los dulces: "Me encantan las piñitas que tienen chile, allá es más de dulce de leche, más de dulce de coco", finalizó.
El galán nos contó cómo se celebra el Día de abril en su natal República Dominicana.
"No tanto como aquí, la verdad que desde que llegué aquí me percaté de la importancia que tiene el Día del niño; yo creo que es un día muy importante que debemos de celebrar todos los días, estoy totalmente convencido de que la mayoría que podamos conservar el niño que tenemos dentro seremos mucho mejores personas, menos intolerantes, mucho más felices, más flexibles, entonces ese niño que hay dentro, hay que celebrarlo no sólo un día sino todos los días".
Confesó que de pequeño era travieso: "Mi papá una vez me regaló un caballo y salí a dar la vuelta, entonces no tenia silla y fui montando y me fui de lado, y si estaba presumiendo mi caballo, pero me caí el primer día".
Carlos imaginaba que era vaquero: "Mi papá siempre usa botas, sombrero y pistola, vivimos siempre de la cosecha del arroz, entonces yo tenía botas y sombrero, y me creía vaquero, y jugaba evidentemente a actuar, veía las novelas y las películas de Pedro Infante, de Jorge Negrete".
Por supuesto que le gustaban los dulces: "Me encantan las piñitas que tienen chile, allá es más de dulce de leche, más de dulce de coco", finalizó.
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